Estos años vieron el retorno del glamour, más sensual y sofisticado, protagonizado por una serie de diseñadores italianos como Gianni Versace, Roberto Cavalli y Dolce & Gabbana (tándem formado por Domenico Dolce y Stefano Gabbana). En estos años surgió la moda minimalista, que fue adoptada por grandes marcas como Gucci, Prada y LVMH. Esta línea comercial se ha visto impulsada por cadenas de moda como H&M, Zara, C&A, Massimo Dutti, Primark, Topshop y Mango.