El auge de la costura italiana se inició en los años 1950 gracias a una apuesta decidida de la industria local, que había empezado a destacar especialmente por su artesanía del cuero, que produjo zapatos y accesorios de gran calidad, con marcas como Gucci, Fendi y Ferragamo. Era un traje de baño compuesto por un sujetador y una braguita ceñidos, que pese a causar un escándalo inicial enseguida se popularizó, sudadera real madrid 2023 sobre todo gracias a celebridades como Brigitte Bardot.