Por otro lado, los bordes de las telas se decoraban con bordados, generalmente de flores, chandal madrid animales y la llamada «greca griega». Por otro lado, el diseñador Azzedine Alaïa lanzó su línea «ropa segunda piel», unas prendas que se ajustaban al cuerpo marcando claramente las formas femeninas, realizadas en elastano. Hacia mediados de siglo, los miriñaques llegaron a su máxima amplitud, de tal forma que dificultaban los movimientos; surgieron entonces las considérations, unas almohadillas para las caderas.